El sábado pasado, hace ya casi una semana, formateé el móvil, proceso que cada vez es más traumático porque si bien ya los contactos están sincronizados con Google y toda la mierda, luego hay varios sistemas de autenticación en dos pasos, probablemente la forma más segura de configurar el acceso a tus cuentas, que van todos a través de dicho móvil.
Total, que tomé todas las putas precauciones posibles de la santa historia, entrar en todos los sistemas de autenticación, todas las páginas y aplicaciones adheridas que se me ocurrieron y demás para sacar los códigos de emergencia y toda la pesca para poder formatear el jodido cacharro y poder volver a configurarlo todo sin problemas.
Ahora viene la broma. Hace ya años que me llegan mínimo un par de veces al año mensajes con el código de confirmación, es decir, la prueba de que algún hijo de puta está intentando entrar con mi cuenta. No me han quitado una cuenta de nada en mi puta vida, tengo más cuidado que la hostia, y cada vez que me ha pasado esto he cambiado la contraseña de Blizzard, pero sigue pasando, tienen que tener menos seguridad que la jaula de un canario.
Total que antes de formatear me meto en la cuenta de Blizzard y genero un nuevo código de seguridad para poder formatear tranquilo. Formateo el móvil, y lo he podido configurar todo menos la puta cuenta de los cojones de Blizzard. El código de seguridad directamente no va. No es que lo haya apuntado mal, estaba copiado al portapapeles y captura a la pantalla hecha por si acaso. No tengo forma de entrar a mi puta cuenta, ni un SMS, ni un email alternativo, ni pregunta de seguridad, ni hostias, ni nada, no - puedo - acceder.
Desde el mismo momento en el que me vi con la puta mierda esta mandé un correo a Blizzard y, ¿sabéis quién sigue sin poder acceder a su puta cuenta? Efectivamente, yo. Y no es que no lo hayan arreglado, es que ni se han dignado a contestar desde entonces, ni un “estamos trabajando en ello” ni nada, me llegó el mail automático de que habían recibido el mensaje y ale, disfruta de la espera. Una puta semana tío. Menos mal, menos mal que no soy un viciado a WoW, ni a Diablo, ni a Overwatch, ni a Starcraft II, ni a Destiny 2, ni a Black Ops 4, porque son muchos juegos de potencial vicio y por culpa del jodido sistema disfuncional, peligrosamente fácil de hackear en conjunción con la pedazo de mierda canuta de soporte ténico que tienen, llevo una semana sin acceso.
Me cago en todo, hostias.