
Pues eso, Valve ha comprado el estudio Campo Santo, creadores de Firewatch que actualmente están desarrollando In the Valley of Gods un juego con muy buena pinta ambientado en Egipto.
Los doce de nosotros en Campo Santo hemos acordado unirnos a Valve, donde mantendremos nuestros trabajos como desarrolladores y continuaremos la producción de nuestro proyecto actual, In the Valley of Gods.
Si eres el tipo de persona que piensa dos veces las noticias, podemos explicar un poco esta gran decisión. En primer lugar, nos gusta mucho hacer videojuegos. Además, y quizás más exacto, nos gusta mucho hacer y producir entretenimiento. Desde la producción cotidiana de nuestro último juego, Firewatch, hasta la forma en que dirigimos la compañía, hacemos merchandising, conocemos a los jugadores en eventos y espectáculos, enviamos las noticias sobre nuestros juegos, lanzamos demos de juegos en medio de un bosque artificial, todo está orientado a sorprender, deleitar y entretener a los clientes que han compartido nuestro éxito.
En Valve encontramos un grupo de personas que, en esencia, sienten lo mismo por el trabajo que hacen (puede que te sorprenda saber que no ocurre todos los días). En nosotros, han encontrado un grupo con experiencia única y perspectivas valiosas y diversas. Rápidamente se convirtió en una pareja obvia.
En segundo lugar, durante la visita a la sede de IGN a principios de 2015 para hablar sobre Firewatch, nos topamos con un Premio al Juego del año 2011 que no se entregó a Portal 2. Resultó estar grabado en una botella de champán sin abrir. Uno nunca deja pasar el alcohol gratis, lo robamos y lo bebimos para celebrar el lanzamiento de Firewatch un año después. Asi que, en cierto sentido, esto es un regreso a casa para nosotros. Bueno, para esa botella de champán.
En tercer lugar, y por último, tuvimos una serie de largas conversaciones con la gente de Valve y todos comparten la satisfacción que sentimos al trabajar con personas cuyos talentos empequeñecen a los nuestros para hacer cosas que nunca creímos posibles. Ambas partes hablamos sobre nuestros valores y cómo, cuando se llega a la conclusión, nosotros, como seres humanos, somos muy limitados por el tiempo que nos queda cuando se trata de hacer las cosas que nos importan y en las que creemos. Nos preguntaron si estábamos interesados en ir a Bellevue y hacer eso allí y dijimos que sí.
Sí, todavía estamos haciendo In The Valley of Gods (¡como un juego de Valve!); sí, todavía apoyaremos Firewatch; y sí, seguiremos produciendo The Quarterly Review y nuestro contenido regular en el blog. Muchas gracias por vuestro interés en nuestros juegos y nos vemos en Washington. Aplausos.
A falta de juegos propios, buenos son los de first party xD